Cuántos Meses De Embarazo Tiene Un Perro
¿Qué sucede durante un embarazo de perros?
Un útero de los perros tiene la forma de una letra V y tiene dos mitades. Una vez que ocurre la concepción, los embriones viajan a los cuernos uterinos y se incrustan en el revestimiento uterino. Para la tercera semana, se pueden detectar latidos fetales. El feto crecerá hasta que tenga aproximadamente el tamaño de una nogal y tendrá párpados y dedos visibles para el día 35.
Etapas de un embarazo de perros
Hay varios cambios que ocurren durante las diferentes etapas del embarazo de un perros, y comprenderlos lo ayudará a comprender lo que está sucediendo con su mascota. Al principio del embarazo, un perro puede exhibir signos como el cansancio y la apatía, que probablemente sean los efectos de las hormonas. También puede desarrollar una descarga que parezca delgada y clara. Afortunadamente, estos síntomas son menores y no deben ser causa de alarma.
Los síntomas del embarazo en los perros incluyen disminución del apetito y los vómitos, así como un cambio en el comportamiento. A medida que avanza el embarazo, un perro embarazado aumentará de peso y comerá más. Una perra también puede tener cambios de humor o exhibir signos de irritabilidad. También puede comenzar a destruir objetos alrededor de la casa y volverse demasiado pegajoso.
La primera etapa del embarazo en un perro ocurre durante el primer mes. En esta etapa, el embrión del perro tiene aproximadamente 15 mm de largo. El embrión ya ha comenzado a formar su sistema nervioso y otros tejidos, incluidos los músculos y los huesos de las extremidades. Los embriones son más frágiles durante este tiempo y cualquier daño puede afectar el desarrollo de cachorros más adelante.
Los síntomas del embarazo en un perro pueden ser similares a los de otras afecciones médicas, por lo que es importante buscar el consejo de un veterinario para un diagnóstico definitivo. Un veterinario puede realizar pruebas de diagnóstico para confirmar el diagnóstico y darle consejos sobre cómo cuidar a su perro. Como regla general, muchos medicamentos no son apropiados para su uso mientras un perro está embarazada. Esto incluye suplementos, también, lo que puede dañar al cachorro no nacido. Si elige darle a su perro un medicamento, es importante discutirlo con su veterinario.
Síntomas del embarazo
Los perros que están embarazados pueden mostrar varios síntomas, incluido un cambio en el apetito y el comportamiento. Pueden parecer más dóciles y perezosos, y pueden no comer tanto como de costumbre. Las hormonas del embarazo pueden causar estos cambios. Algunos perros embarazados incluso podrían volverse pesimistas. Si nota estos síntomas en su perro, debe llevarlo al veterinario lo antes posible.
Debido a que los síntomas del embarazo del perro pueden parecerse a otras afecciones, primero debe consultar a un veterinario para asegurarse de que su perro esté realmente embarazada. El veterinario puede realizar varias pruebas de diagnóstico y determinar si su perro está embarazada o no. También pueden recomendar más pruebas. Algunas de estas pruebas incluyen pruebas hormonales, ultrasonidos y radiografías.
Aunque la mayoría de los perros no exhiben ningún síntoma físico del embarazo, algunos de ellos pueden mostrar signos en su comportamiento. Estos incluyen un mayor apetito, mayor sed, náuseas matutinas y disminución del apetito. Algunos perros incluso pueden vomitar. Estos síntomas suelen ser temporales y desaparecerán en la sexta semana. Otros síntomas del embarazo incluyen mayor peso, pezones más grandes y un área abdominal agrandada. Algunos perros embarazados pueden volverse letárgicos o tener una pérdida de apetito.
Algunos perros tienen un apetito reducido al comienzo del embarazo, pero esto puede cambiar a medida que avanza el embarazo. También pueden necesitar orinar más de lo normal, debido a un aumento en los niveles hormonales. También pueden tener pezones más oscuros, lo que indica la ampliación del útero. Otros signos de embarazo en perros incluyen un abdomen hinchado y un comportamiento pegajoso.
Necesidades nutricionales de un perro embarazado
Las necesidades nutricionales de un perro embarazado después de 6 meses son similares a las de un ser humano, y hay varias cosas a tener en cuenta. Por ejemplo, un perro embarazado necesitará más vitamina C que un perro normal. La vitamina C ayuda en la absorción de hierro, ayuda con el crecimiento del nuevo tejido y apoya el sistema inmunitario. Los alimentos que son altos en vitamina C incluyen la mayoría de las frutas y verduras. La vitamina D también es importante para un bienestar de los perros, y debe incluirse en la dieta de los perros. Algunos ejemplos de alimentos ricos en vitamina D incluyen salmón, caballa enlatada y productos lácteos.
Las necesidades nutricionales de un perro embarazado después de 6 meses son más altas que durante las primeras etapas del embarazo. El cuerpo de la madre debe mantener de tres a cuatro veces la cantidad de energía que se requiere para el cachorro, y ella también necesita calorías adicionales para la lactancia. Por lo tanto, alimentarle una buena dieta es esencial para mantenerla saludable y proporcionar suficiente leche para el cachorro en crecimiento.
En las últimas tres o cuatro semanas de embarazo, el cachorro crece rápidamente. Como resultado, un perro embarazado debe comer 25 a 30% más de alimentos de lo normal. Cuando se entrega el cachorro, el peso de los perros debería haber aumentado en otro 25 a 30%.
Rayos X
Si un perro está embarazada, a menudo tendrá radiografías. Esta es la forma más temprana de determinar el estado del embarazo de un perros. Pueden detectar latidos del corazón y el tamaño del feto. También pueden darle a un veterinario una idea de cuántos cachorros están creciendo dentro del útero. Sin embargo, estos resultados no siempre son precisos.
Un ultrasonido es otra herramienta para determinar si un perro está embarazada. Es especialmente útil para identificar la viabilidad fetal. Se realiza mejor a la gestación de 25-35 días, ya que los ultrasonidos realizados antes de este tiempo pueden dar un resultado falso negativo. El ultrasonido también le permite escuchar el latido del feto, que es aproximadamente 2-3 veces más rápido que los latidos del corazón de las presas. En algunos casos, el ultrasonido también puede detectar sonidos placentarios. Los ultrasonidos también se pueden usar para calcular la edad gestacional, que puede ser útil para separar el embarazo de otras causas.
Aunque las radiografías son útiles para determinar si un perro está embarazada, no es el método más preciso. Los ultrasonidos pueden dar una imagen mucho más detallada del embarazo de un perros. Un ultrasonido puede detectar la presencia de cachorros incluso a las tres semanas.
